Proyecto de interiorismo contract para la transformación de una ferretería de toda la vida, optimizando el almacenaje, ampliando la zona de exposición y adaptando el recorrido y la experiencia de compra a las necesidades actuales del mercado.
Resolvemos creando un ambiente más moderno, ordenado y funcional, sin perder la esencia y el trato personalizado que caracteriza a esta ferretería de siempre. Apostamos por el color verde botella, que transmite elegancia, sobriedad, equilibrio y distinción y lo contrastamos con detalles de cobre en zonas estratégicas para darle un toque de brillo y calidez. Diseñamos un entramado de instalaciones que genera textura y movimiento, pintado del mismo verde para crear continuidad y obtener un espacio con carácter y personalidad. Incluimos luminarias técnicas y decorativas, aprovechando materiales reciclados como escurridores para la creación de originales lámparas que destacan el producto y crean recorridos que atraen la atención y la curiosidad de los clientes. Alicatado en forma de espiga, simulando barro cocido esmaltado de la firma @wow_designeu, que proyecta serenidad y calidez a un ambiente que nos recuerda al hogar, pero con un toque moderno y elegante. Pinceladas retro y divertidas en los baños, con griferías de inspiración vintage, papel pintado de textura ochentera y mobiliario y sanitarios acordes. En el despacho, el reto consistía en la puesta en valor de la historia familiar de una ferretería industrial con más de 50 años de trayectoria. Y lo hicimos realidad con un mural personalizado de la imagen del fundador, y padre de las actuales propietarias, a modo de tributo a su memoria y su legado.